A finales de Mayo tuvo lugar una exposición en la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando sobre el Ikebana o arte floral japonés con motivo de la Conmemoración de los 400 años de relaciones hispano-japonesas.
La exposición se centró en el arte desarrollado por la Escuela Ikenobo. Dicha escuela tuvo sus orígenes en el siglo VI de la mano de Ono no Imoko quien, tras realizar varias visitas oficiales a la corte imperial de China, se retiró como guardián de un tempo budista en Kyoto. Puesto que en sus viajes a China había tenido sus encuentros con el arte floral, ya en su retiro continuó con él fundando la Escuela Ikenobo (conocida así porque se instaló en una casa rústica cerca de un río -Ikenobo significa "al lado del río"-), la más antigua de Japón dedicada al Ikebana y que aún sigue en funcionamiento.
La exposición estaba situada en el patio de la Academia y en ella se pudo disfrutar de las muestras de numerosos artistas, tanto japoneses como internacionales. La verdad es que me encantó la exposición, las muestras eran preciosas, y destilaban calma y elegancia por doquier. Es como si al ver cada obra de arte, el artista no solo te transmitiera la belleza de las flores, sino también el cariño, la calma y la dedicación con la que ha realizado cada una de ellas.
Desgraciadamente, no se podían hacer fotos de las obras, pero me he permitido "robar" las fotos de su página web, así que aquí les dejo algunas imágenes:
Besos dementes,
NdM
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